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Los Reyes Magos llenan de ilusión y emoción el estadio
Como cada 5 de enero, Sus Majestades de Oriente volvieron a llenar ayer de ilusión y emoción el estadio Heliodoro Rodríguez López de la capital, donde cerca de 18.000 personas, entre niños, niñas y sus familias, esperaban expectantes la llegada de Melchor, Gaspar y Baltasar, en uno de los eventos más populares y queridos tanto por chicharreros como por familias de toda la Isla y que este año ha registrado la mayor asistencia efectiva de público al estadio, según destacaron desde el ayuntamiento.
Desde la apertura de las puertas a las 15.30 horas, los alrededores del estadio se fueron llenando de familias ansiosas por poder ver de cerca a Sus Majestades. Hubo accesos concretos para las personas con movilidad reducida, así como para aquellos con discapacidad visual y se contó, además, con intérpretes de lengua de signos y pictogramas, que fueron proyectados en la pantalla gigante de la instalación deportiva. El evento también fue retransmitido en directo por las cámaras de Canal 4 Televisión.
Las gradas calentaban motores al grito de “¡Qué vengan los Reyes!”, y a las 17.00 horas arrancó puntual el espectáculo previo al recibimiento de los Reyes Magos, organizado por el área de Fiestas del Ayuntamiento capitalino y que, bajo la dirección de Paula Álvarez, estuvo protagonizado este año por el famoso show musical infantil de Cantajuego, que puso a cantar y a bailar a todo el estadio al ritmo de las canciones más conocidas de todos los tiempos, que hicieron las delicias tanto de niños como de mayores, quienes también disfrutaron recordando algunos de los temas más populares de su infancia.
Cerca de 600 bailarines y figurantes intervinieron en las coreografías ideadas para la ocasión, en un espectáculo lleno de música y bailes que hizo disfrutar a las familias, a pesar de que la acústica no era la mejor. Haciendo un guiño al Carnaval de Santa Cruz, el show incluyó el conocido tema La vida es un Carnaval al ritmo de las luces del estadio y bajo la serpentina.
Hacia el final del espectáculo, los nervios y la expectación se palpaban y al grito de “¡Melchor, Gaspar, Baltasar!”, los niños y niñas llamaban a Sus Majestades desde las gradas, que vibraron con los gritos de los miles de asistentes cuando cerca de las 18.00 horas se oyó el sonido del helicóptero del Ejército anunciando la proximidad de Sus Majestades, que hizo dos vueltas sobre el recinto deportivo.
Y la ilusión se desbordaría con la entrada de los Reyes Magos al estadio, acompañados por sus respectivos séquitos de pajes y embajadores, siendo recibidos por los vítores de las miles de personas congregadas. Una vez en el recinto, el alcalde, José Manuel Bermúdez, acompañado por el concejal de Fiestas, Javier Caraballero, entregó a Sus Majestades la llave mágica que abre las puertas de todos los hogares chicharreros para dejar sus regalos por la noche.
La locura se desató cuando Melchor, Gaspar y Baltasar se acercaron a las gradas para saludar a los asistentes y recoger las últimas cartas con sus deseos para una noche tan mágica. La emoción, el cariño y la ilusión se podían ver reflejadas en las caras de los más pequeños.
Una vez finalizada la recepción real, Sus Majestades salieron del recinto para presidir la cabalgata que discurrió por las calles de la ciudad, acompañados de sus respectivos cortejos, y prepararse para una larga noche de reparto de regalos.